Consigue aportar el máximo de hidratación posible a tu cabello. ¿Cómo?
Con miel
Como lo lees. La miel es una excelente hidratante y puedes usarla en plan mascarilla para nutrir tu cabello, aportarle brillo y aumentar su volumen. Déjatela puesta unos 20 minutos y luego aclara tu pelo con unos agradables chorros de agua tibia.
Con un acondicionador
Elige uno de peluquería, ya que los que venden en los hipermercados y supermercados no son muy eficaces (no todos). Cuando vayas a escoger el acondicionador, fíjate en el letrerito que lleve el bote y procura que se adecúe a las carectériscas de tu pelo: cabello liso, ondulado, castigado, teñido… Mejor que apliques el doble de cantidad de acondicionador en las puntas del pelo, ya que son las que más necesitan un extra de hidratación.
Con una mascarilla reparadora
Y que contenga ingredientes vegetales como aloe vera, leche de almendras, aguacate, etc. Aplícatela una vez a la semana, durante un mes. Notarás su efecto a largo plazo.
Truco de Belleza
Cuando tengas que aclarar el pelo, jamás uses agua caliente, ya que ésta reseca mucho el cabello y de nada servirían las curas que le estás dando. El agua fría tampoco es idónea, ya que no limpia en profundidad el pelo, aunque esta nos proporciona brillo al pelo. Como bien intuyes por descarte, la temperatura ideal del agua para un buen aclarado es ni muy fría ni muy caliente: tibia.