Para limpiar y exfoliar la piel del rostro se pueden usar diversos productos y tratamientos, de los cuales las mascarillas a base de arcilla son casi obligatorias y encontrarás un montón de mascarillas de arcilla de todas las marcas.
Las mascarillas de arcilla son purificantes para el rostro. Sobre todo para pieles grasas, los resultados son aún más notables, porque parte de la fórmula de estas mascarillas es arcilla sintética y natural (almidón y caolín) cuya principal función es absorber la grasa (es decir, que poco a poco reducirá la cantidad de acné y puntos negros).
Los resultados de las mascarillas se empiezan a notar si se es constante con su aplicación: bastan 2 ó 3 veces por semana para empezar a controlar la producción de sebo y reducir las espinillas y acné, sobre todo de la zona T.
Hay que aplicar la mascarilla con una capa muy fina, de manera que no nos estire la piel. Si notamos que la mascarilla nos estira la piel, es que nos hemos pasado de producto y a la próxima tendremos que extenderlo mejor o aplicar menos cantidad. Al ser un producto bastante espeso, con una poca cantidad basta. No apliques tu mascarilla por la zona de los labios ni la de los ojos, déjala actuar de 10 a 15 minutos y retírala con abundante agua.
Personalmente uso una mascarilla de arcilla de Olay, es la primera que probé y ya me he quedado con ella porque me ha dado resultados.
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