Hace unos días os hablábamos de la rinoplastia, una intervención estetica muy demandada. Antes de someteros a una intervención de este tipo y siempre bajo la tutela del médico o cirujano, conviene estar informados sobre secuelas posibles de una operación: las cicatrices.
La cicatriz es consecuencia de la reparación de los tejidos después de un traumatismo. Todo paciente que sea operado tendrá cicatrices que se verán más o menos dependiendo de:
- Calidad de la reparación efectuada por el cirujano.
- Capacidad de cicatrización del paciente.
No existe una manera de saber cómo va a quedar la cicatriz antes de realizar la operación.
Durante el periodo de cicatrización los expertos recomiendan:
- No exponer la cicatriz al sol.
- Aplicar cremas cicatrizantes de venta en farmacias.
- Evitar masajes y manipulaciones sobre las cicatrices.
- Acudir al cirujano si se observan anomalías como enrojecimiento o aumento de grosor.
- Aplicar presoterapia.