La comida para bebé casera no tiene por qué ser sinónimo de horas y horas de trabajo o de corte eterno de verduras, sino que es posible preparar comida para bebés sin pasar demasiadas horas en la cocina ni recurrir a comida ya preparada.
Gracias a su necesidad de dieta limitada y a la necesidad de aprender a masticar, los menús se hacen más restrigindos, pero no por ello deben renunciar a experimentar nuevos sabores y texturas más allá de la leche.
Los alimentos más importantes que debería incluir esta dieta son las verduras, ya que son fáciles de masticar, aportan muchos nutrientes y permiten saborear algo distinto sin que haya grandes diferencias entre sí. Para cocinar este tipo de alimentos se pueden utilizar diferentes maquinarias, desde el mortero hasta las batidoras, no obstante, para una preparación más sencilla, también se pueden utilizar verduras congeladas. ¿Qué tal un puré de guisantes? Tan sólo se necesita descongelar y triturar.
Si preferís una comida más original, os recomiendo un puré a base de pera y zanahoria, aportando los nutrientes de la verdura y también los de la fruta, con un sabor fresco y rico. Por supuesto, lo tendréis preparado en un momento.
Y vosotras, ¿qué comidas caseras preparáis para vuestros bebés? No dudéis en compartirlo con nosotras.