Cómo hacer un limpiador facial casero

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Aunque creamos que sólo con aplicar cremas, junto con diferentes tratamientos específicos en la piel ya es suficiente la realidad es que esto no basta.

Esta creencia, está bastante generalizada sobre todo cuando nos referimos a la limpieza facial diaria.

Podemos pensar, que los limpiadores faciales no son específicos, tal y como ocurre con las cremas que aplicamos en función de nuestro tipo de piel o necesidades.

Por ello, no queremos andarnos por las ramas y desde el inicio te comentamos que hoy queremos centrarnos en los limpiadores faciales naturales.

Pero aún hay más, porque te proponemos varias recetas para que sepas bien cómo hacer un limpiador facial casero.cuidado facial casero

A cada tipo de piel, le corresponde un tipo de limpieza natural

Los cuidados faciales naturales en la actualidad cada vez cuentan con una mayor aceptación, no es de extrañar, porque…¿a quién no le atrae la idea de limpiar la piel de una forma correcta y específica con productos naturales?.

Existen muchas ventajas que nos conducen a elegir esta alternativa, esta modalidad de cuidados e higiene del cutis, siendo la primera de ellas huir, definitivamente, de los componentes químicos.

Pero, no queremos que te lleves una decepción porque, aunque las ventajas ganen por goleada a los inconvenientes que presenta limpiar el rostro de una forma natural, estos inconvenientes también existen y por seguridad, debemos tenerlos al menos en mente.

Lo cierto es que nuestra dermis nos exige mucho más, porque aunque de una forma general podamos llegar a creer que una limpieza facial con ingredientes naturales sigue unas sencillas pautas flexibles que se adaptan a cualquier tipo de piel, una vez que nos decidamos a aplicar dichas alternativas caseras nos daremos cuenta que esto no es del todo cierto.

Cada piel, (ya se suele decir con bastante frecuencia) es un mundo, por ello debemos detenernos a observar, entender qué tipo de necesidades particulares requieren nuestros tejidos de una forma personal.

Para no quedarnos con la duda, algo que no falla nunca para acertar al 100 % con los componentes naturales que añadiremos en nuestra limpieza es la consulta previa con el personal indicado, que esté especializada en tratamientos de este tipo.

De esta manera, no solo conseguiremos limpiar nuestro cutis de una forma saludable sino que acertaremos completamente con los ingredientes que mejor nos sientan.

Aunque por supuesto, no queremos dejarnos atrás el uso de limpiadores faciales menos alternativos, ya que también pueden sumar beneficios en nuestra piel.

Aquí te dejamos, antes de seguir avanzando, los mejores: mejores limpiadores faciales.

Y si crees que el uso de este tipo de productos es una cuestión femenina, en este enlace te demostramos que no estás, ni mucho menos en lo cierto. Para limpiar a fondo la piel masculina, haz click justo aquí: mejores limpiadores faciales para hombre.

Seguir una limpieza facial natural cada día, despertará definitivamente la piel de tu rostro

La limpieza del cutis es uno de los cuidados faciales más importantes, sin embargo, son muchas las ocasiones que este paso inicial queda menospreciado, sin que le prestemos toda la atención que merece.

Quizás a veces, debido a la cantidad de tratamientos, fórmulas, productos que podemos utilizar para realizar este importante paso, nos saturamos y finalmente terminamos repitiendo lo mismo que hemos estado haciendo desde siempre: lavar el rostro con agua tibia dos veces al día.

No queremos decir con ello, que este proceso de limpieza no contenga también importancia, sino que además de lavar la piel cada día debemos realizar ese “algo más” que nuestro cutis nos reclama.

De hecho, fíjate lo importante que puede llegar a ser el hecho de limpiar la piel cada día, que incluimos a continuación un enlace donde desarrollamos mejor este tema. Lo puedes ver aquí: ¿por qué es importante lavarse la cara dos veces al día?.

Para evitar caer en la tediosa rutina, tal y como ya hemos mencionado, hoy queremos proponerte algo más alternativo, diferente.

Así que recorreremos los pasos que comprende el proceso de limpieza facial, pero añadiendo en cada uno una alternativa natural diferente.

Necesitas algo de tiempo, para poner en práctica estas recetas, pero…¡ha llegado el momento de dedicarle a tu piel el tiempo y los cuidados que tanto se merece!. ¡Allá vamos!.

1. Desmaquilla la piel

Existen numerosos remedios, productos y soluciones limpiadoras para desmaquillar el cutis.

Aunque a veces por descuido o falta de tiempo, intentemos camuflar una tez apagada y opaca bajo capas de maquillaje, la realidad es que esta falta de limpieza siempre saldrá a relucir.

De hecho, el uso de maquillaje, mediante capas, coberturas, sobre una dermis que no cuenta con la higiene suficiente solo hará añadir más problemas, un asunto que ni mucho menos nos conviene.

En el proceso de desmaquillar la piel entran en juego varios factores, uno de los más destacados en nuestro tipo de dermis particular.

Por ejemplo, cuando contamos con una piel más seca podemos optar por utilizar leches, bálsamos o aceites más nutritivos.

Existen productos en el mercado que pueden cubrir ampliamente tus necesidades, echa un vistazos en este enlace: mejores leches limpiadoras.

Sin embargo, como hoy la cosa va de alternativas, remedios naturales te proponemos desmaquillar la piel utilizando un aceite natural, que nunca falta en nuestra cocina: el aceite de oliva.

La alternativa natural: desmaquíllate con aceite de oliva

aceite de oliva limpieza casera

El aceite de oliva es el componente natural perfecto para realizar una limpieza más profunda en casa y lo mejor, es que además de ser imprescindible en nuestra dieta, también se convertirá en un desmaquillante indispensable.

Actúa como un producto desmaquillante natural eliminando todos los restos como bases de maquillaje, correctores o barras de labios.

Se utiliza sobre todo en dermis más secas, debido a que se trata de un aceite de absorción lenta que aporta una hidratación considerable.

Para aplicarlo, debemos hacerlo de la siguiente manera: sólo debes verter sobre un algodón algunas gotas de aceite de oliva y con mucha suavidad, lo pasaremos por el rostro comenzando por la zona T, la frente, la nariz y la barbilla.

A continuación seguiremos el proceso, limpiando el resto del cutis y no olvidaremos ni el cuello, ni el escote.

2. Abre los poros, retira la suciedad

En el segundo paso de esta limpieza facial casera que te proponemos no debe faltar un punto concreto donde expliquemos, como de una manera natural también, podemos abrir los poros en casa mediante el uso de vapor para retirar de su interior la suciedad.

Un proceso de toda la vida: el vapor de agua

Tras desmaquillar bien el cutis, es fundamental abrir los poros para extraer de su interior los restos que permanecen aún, obstruyéndolos.

Este remedio es bastante recurrente ya que, se puede hacer en casa de una forma muy sencilla. Lo primero, es hervir agua en una cacerola pequeña.

Una vez que el agua entra en ebullición la retiraremos del fuego y acercaremos con mucho cuidado el rostro al vapor, siempre a una distancia considerable ya que el propio vapor puede provocar quemaduras en la piel.

Para que el vapor penetre mejor en el interior de los poros podemos cubrir la cabeza con una toalla y mantener el rostro frente al vapor, expuesto durante unos 10 minutos.

La idea es que el vapor actúe en el interior de los poros y consiga eliminar las impurezas, del mismo modo que lo haríamos en la consulta de un especialista o profesional.

Este paso puedes realizarlo una vez a la semana, o en los casos donde el tiempo escasea, una vez al mes.

3. Procede a exfoliar la piel

Seguiremos con el proceso, esta vez, para detenernos en otro punto importante: la exfoliación.

Es imprescindible para que nuestros tejidos se regeneren de una forma correcta y mantengan un proceso adecuado.

Debemos conseguir, para ello, eliminar los restos de piel muerta y células, impurezas, restos de suciedad o incluso algún excedente de maquillaje que aún persista.

A continuación, te mostramos como elaborar un exfoliante natural en casa que puedes aplicarlo una vez a la semana.

Conseguirás estimular la regeneración de la piel y deshacerte de las tediosas células muertas.

Exfoliante natural con miel + azúcar

La mezcla de estos dos componentes naturales, nos dará como resultado un maravilloso exfoliante casero.

De nuevo, para no complicar el asunto demasiado, para realizar este exfoliante casero solo necesitas lo siguiente:

Mezclaremos muy bien una cucharada de miel con dos cucharadas de azúcar. Te aconsejamos que sea azúcar blanca refinada, ya que conseguirás así que la exfoliación sea más suave.

Si notamos que la mezcla está demasiado untuosa, podemos añadirle un poco de agua para diluirla y enseguida, la extenderemos sobre el rostro.

La dejaremos actuar unos minutos y masajearemos suavemente, mediante movimientos circulares. A continuación deja reposar el exfoliante casero sobre el rostro y procede, para finalizar a eliminarlo con agua tibia.

Aunque no lo creas, limpiar el rostro con agua también contiene sus propias reglas. Lo puedes comprobar con tus propios ojos en este enlace: 15 errores que estás cometiendo al lavarte la cara.

4. Masajea el rostro con aceites naturales

Tras realizar una exfoliación adecuada en el rostro conviene regenerarlo, activarlo de nuevo y qué mejor manera que realizando un suave y envolvente masaje con aceites naturales.

Puedes optar por aceite de rosa mosqueta o aceite de almendras, pero nosotras en esta ocasión te mostramos como masajear la tez de tu rostro con un elixir multiusos natural que nos encanta, la rosa mosqueta.

Aplica un envolvente masaje con aceite de rosa mosqueta

masaje facial limpieza casera

El aceite de rosa mosqueta es un ingrediente que no debe faltar en tu neceser, ya que es muy útil para realizar distintos cuidados en el rostro.

La rosa mosqueta cuenta con beneficios más que testados y comprobados para evitar que los tejidos de nuestro rostro envejezcan de una forma prematura.

Por consiguiente, no solo consigue reducir las arrugas sino que además mejora las manchas y cicatrices.

Esta rica fuente de nutrientes y antioxidantes, la rosa mosqueta, se puede aplicar en la piel cada día mediante relajantes masajes que puedes realizar tu misma/o en casa.

Aplica unas gotas en las yemas de los dedos y mediante movimientos lentos y controlados con la punta de los dedos (sin ejercer mucha presión) ve suavemente extendiendo el aceite.

Se absorbe muy rápido, así que no tendrás que esperar demasiado para completar el siguiente paso.

Los aceites son una parte importante en el proceso de limpieza conocido como doble limpieza. Si quieres aprender cómo debes realizar esta limpieza intensiva toma nota de este artículo: doble limpieza facial.

5.  Añade en el proceso de limpieza una mascarilla hidratante casera

Después de relajarnos con un suave masaje, ha llegado el instante preciso para aplicar una mascarilla facial, por supuesto, también casera.

Puedes decantarte por diferentes opciones, pero en este punto te hablamos de las bondades que ofrece la arcilla verde en tu dermis.

Mascarilla facial con arcilla verde

La arcilla verde es un poderoso agente purificante, si quieres limpiar tu rostro con una mascarilla natura anota la siguiente receta:

Mezcla una cucharada de arcilla verde con dos cucharadas de aceite de oliva y el jugo de un limón.

La consistencia de esta mascarilla debe ser bastante pastosa, para que podamos aplicarla sobre el rostro de una forma cómoda.

Déjala secar, actuar 15 minutos y enseguida, retírala con agua tibia. ¡Ojo! debido a que contiene zumo de limón es importante que en el proceso de secado no te expongas al sol, ya que podría provocar quemaduras.

Utilizar una mascarilla facial al menos una vez a la semana es una necesidad básica de cuidado de la piel, pero existen distintos aspectos que no debemos descuidar. Anótalos, cliclando aquí: necesidades básicas de cuidado de la piel.

6. Finalizaremos, tonificando la piel

Para dar por finalizadísima la limpieza del rostro en casa, solo nos queda un último paso: cerrar los poros dilatados, tonificando a la vez nuestra tez.

Aplica bolsas de té verde frío

Prepara dos bolsas de té verde y una vez que estén listas, e infusionadas, déjalas enfriar.

Mediante pequeños toquecitos con las bolsas, iremos tonificando la piel del rostro aprovechando las propiedades astringentes que el té verde nos regala.

Termina limpiando el rostro con agua tibia y aplicando tu crema hidratante habitual preferida…¡y listo! 🙂

Además del extenso recorrido que te proponemos en este artículo para limpiar el rostro, terminamos añadiendo otras alternativas, muy eficaces. Sólo tienes que clicar en el enlace: 5 formas naturales de limpiarte la cara.

saludable limpieza casera

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