

Hay muchas formas de sorprender en San Valentín a nuestra pareja sin necesidad de grandes preparaciones. ¿Quieres saber cómo?
Si ya tenemos el look que vamos a lucir en la noche del día de los enamorados, así como la lencería con la que vamos a dejar sin palabras a nuestra pareja, ha llegado el momento de pensar en el resto de cosas que debemos tener en cuenta.
¿Qué peinado nos vamos a hacer?
Lo importante de esa noche no será cómo llevemos el pelo, por lo que cuanto más sencillo sea nuestro peinado, mucho mejor, ya que así el protagonismo lo deberemos tener nosotras y las cosas que hagamos para sorprenderle.
Eso sí, si podemos darle un toque de romanticismo también a nuestro pelo… ¿por qué no? Además, ya que tanto está de moda la decoración de nuestras uñas, ¿por qué no sacarle partido y hacernos algo especial y romántico?
¿Cómo sorprender?
No hay nada mejor que pequeñas declaraciones de amor durante el día de los enamorados para hacerle ver a esa persona todo lo que nos importa. Por ello, os traigo diferentes ideas sobre qué podemos hacer.
Lo ideal sería cenar en casa de uno de los dos, preferiblemente en la nuestra para poder prepararlo todo de antemano:
– Las velas son fundamentales en una velada como esta, aportan un clima de romanticismo y serenidad que, acompañado de música de jazz de fondo hará que consigamos el entorno ideal para nuestra cena.
– Deberemos procurar que la cena sea especial pero no muy pesada, decantándonos por un menú apropiado para una noche especial en el que los postres deberán ser los grandes protagonistas.
Por ello, mejor varios postres que den juego y nos permitan sacar nuestro lado más atrevido y sensual, que una comida demasiado copiosa que luego nos pase factura. En las cenas más románticas, las fresas juegan un papel importantísimo, y más si son bañadas en chocolate.